Todas las noches, antes de dormir se medita por la forma de actuar, de pensar y de hablar que se ha tenido durante todo el día. Se medita sobre los errores y los aciertos, sobre lo que se ha hecho y lo que no, pero que se ha debido de hacer, pidiendo perdón y haciendo un verdadero propósito de enmienda y de buenas intenciones en la planificación del comportamiento para el día siguiente.
La norma a seguir será: ” No haré a ninguna persona, animal o cosa lo que no me gustaría que me hicieran a mí”.