
Sea mi faro y mi Luz
Y el demonio tentador
No sea mi director.
Retírate, ¡Satanás!
Y pompas ni vanidades
No me aconsejes jamás,
Porque sólo son maldades
Y venenos los que das,
¡Bébelos tú, si te placen
sus efectos!
El Portal Espiritual de la Red
Oh Dios infinito de amor y misericordia, ante tí vengo una vez más para comulgar con tu presencia; en silencio, dentro de mi corazón, te pido que permitas a los Arcángeles y a sus huested angélicas morar en mi mundo y en el de mis hermanos, para que vivan diariamente con nosotros, como amigos y compañeros, como servidores divinos de la luz, hasta que ellos sean la presencia maestra en mi Ser. Infinitas gracias, Dios del Universo, por tu respuesta a ésta y cada llamada. Amén.
Padre: Yo perdono a todo el que necesita mi perdón y a mí mismo, y aunque sé que en el plano espiritual no existe nada que perdonar, yo perdono porque así cambio la idea del que cree hacerme el mal. Invito a mis guías invisibles a utilizar mi sueño para yo hacer el bien en donde sea oportuno. Gracias te doy Padre Adorado.
No te apartes de mi nunca,
quiero estar contigo cada noche y cada día
aun cuando llegue el momento en que descanse
feliz al lado de Jesús y en los brazos de María,
serás tu siempre mi amada compañía.
Aunque espíritu invisible,
sé que te hallas a mi lado,
escuchas mis oraciones
y cuentas todos mis pasos.
En las sombras de la noche,
me defiendes del demonio,
tendiendo sobre mi pecho
tus alas de nácar y oro.
Angel de Dios, que yo escuche
tu mensaje y que lo siga,
que vaya siempre contigo
hacia Dios, que me lo envía.
Testigo de lo invisible,
presencia del cielo amiga,
gracias por tu fiel custodia,
gracias por tu compañía.
En presencia de los ángeles,
suba al cielo nuestro canto:
gloria al Padre, gloria al Hijo,
gloria al Espíritu Santo. Amén.
Angel de la paz, ángel de la Guarda, a quien soy encomendado, mi defensor, mi padre, mi vigilante centinela: Gracias te hago, que me libraste de muchos daños y peligros del cuerpo y del alma. Gracias te hago, uqe estando durmiendo, tú me velaste y despierto, me encaminaste; al oído, con santas inspiraciones me avisaste; yo, encenagado en los vicios mundanos, no me valía de tus consejos, y como desgraciado, no me curaba. Perdóname, amigo mío, mensajero del cielo, consejero y protector y fiel guarda mía: muro fuerte de mi alma, defensor y compañero celestial. En mis desobediencias, vilezas, desvergüenzas y mis muchas descortesías que hoy cometí en tu presencia, tú siempre me ayudaste y guardaste. Ayúdame y guárdame siempre, de noche y de día, Amén.
Después se reza un Padre Nuestro y un Ave María.
¡Oh! Dios, que entre todos los ángeles elegiste al Amoroso Arcángel San Gabriel para anunciar el misterio de tu Encarnación; concédenos benignamente que los que celebramos su festividad en la tierra, experimentemos su patrocinio en el cielo. (Aquí se pide la gracia que se desea) Poderosísimo Arcángel Gabriel, tu que eres la fuerza de Dios lávame en tus benditas aguas de purificación, aumenta mi intuición, y ayúdame a recordar lo que Yo Soy. En sueños dame a beber el líquido del verdadero amor. Y con tu trompeta anuncia a mi alma que ya es el tiempo de levantarme de entre los muertos y resucitar mi conciencia a la Luz.
Amén.
Señor, ten piedad- Cristo, ten piedad.
Señor, ten piedad- Cristo, óyenos,
Cristo escúchanos- Dios Padre celestial
Dios Hijo Redentor del mundo- Dios Espíritu Santo
Trinidad Santa- un Solo Dios.
Santa María- Santa Madre de Dios
Santa Virgen de las vírgenes- madre de Cristo,
madre de la Iglesia- madre de la Divina Gracia.
Madre purísima- madre castísima,
madre incorrupta- madre inmaculada,
madre amable- madre admirable,
madre del Buen Consejo- madre del Creador,
madre del Salvador- Virgen prudentísima,
Virgen venerada- Virgen alabada,
Virgen poderosa- Virgen clemente,
Virgen fiel- Espejo de Justicia,
trono sabiduría- causa de nuestra alegría,
vaso espiritual- vaso honorable,
vaso digno de honor- vaso insigne de devoción,
Rosa mística- Torre de David,
torre de Marfil- casa de Oro,
Arca de la Alianza- Puerta del cielo,
estrella de la mañana- salud de los enfermos,
refugio de los pecadores- consuelo de los afligidos,
auxilio de los cristianos- reina de los ángeles.
Reina de los patriarcas- Reina de los profetas,
Reina de los apóstoles- Reina de los mártires,
Reina de los confesores- Reina de las vírgenes,
Reina de todos los santos- Reina concebida en gracia,
Reina elevada al cielo- Reina del Santo Rosario,
Reina de la familia- Reina de la paz,
Cordero de Dios que quitas el pecado del mundo.
Cordero de Dios que quitas el pecado del mundo.
Cordero de Dios que quitas el pecado del mundo.
Señor, ten piedad de nosotros.
Cristo, ten piedad de nosotros.
Señor, ten piedad de nosotros.
Cristo, óyenos.
Cristo, escúchanos.
(Después de cada frase se dice: «ten piedad de nosotros»)